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¿Cómo elegir el mejor momento para quedar embarazada?

¿Cómo elegir el mejor momento para quedar embarazada?

Tener un hijo trae a la vida de la mujer muchos cambios y nuevas responsabilidades. Así, no siempre es posible sentirse totalmente segura de que el momento elegido para quedar embarazada es el más adecuado, ya que ésta es una nueva experiencia y, con ella, inseguridades pueden surgir.

Es cada vez más común encontrarnos con mujeres que deciden posponer la maternidad y dedicarse, primero, a otros proyectos de vida, como estudios y vida profesional. El medio cultural influye fuertemente en esta decisión, muchas veces estipulando un "tiempo cierto" para quedar embarazada.

La elección del momento para tener un hijo puede ser orientada no sólo por el deseo de la mujer o pareja, sino también por lo que se espera la sociedad. Es común oír comentarios del tipo: es muy temprano; es muy tarde; [

] La preparación emocional de la mujer es un factor de gran importancia y que puede ser decisivo para determinar el momento más adecuado para quedar embarazada

En la década de 50, por ejemplo, la mayoría de las mujeres no tenían la opción de elegir el mejor momento para quedar embarazada, el anticonceptivo aún no existía y luego del matrimonio era bastante común el anuncio de la primera de muchos embarazos. En esa época, las mujeres tenían una función materna bien definida: la maternidad se superpone entre otros papeles que podrían ser ocupados.

Hoy la mujer tiene la opción de elegir la época de su vida en que quiere tener un hijo, y si quiere tenerlo. A pesar de que todavía vivimos muchos residuos culturales de las décadas pasadas y del cobro social sigue siendo latente, es posible observar el cambio de comportamiento de forma nítida. Con los avances de la medicina, es común que muchas mujeres se queden embarazadas con más de 35 años, y con una mayor seguridad de que los factores físicos no serán impeditivos para la realización de su sueño.


La hora correcta

¿La mujer a los 22 años está preparada para ser madre? Y a los 40, con la vida profesional estabilizada, ella ya puede pensar en la maternidad?

A pesar de que las condiciones físicas son muy significativas en la planificación de un embarazo, la preparación emocional de la mujer es un factor de gran importancia y que puede ser decisivo para determinar el momento más adecuado para quedar embarazada.

La maternidad exige de la mujer una dedicación diferenciada. Después de nacer, el bebé depende del 100% de sus cuidados, el aumento de la responsabilidad trae muchos cambios en su vida, y esa demanda requiere disponibilidad emocional y física.

La decisión no es simple y, en algunas situaciones, puede causar ansiedad, pues incluso después de planear y desear el embarazo, algunas mujeres todavía pueden preguntarse: ¿Será que éste es el mejor momento? ¿Es que debería haber esperado un poco más?

Es natural que los cuestionamientos aparezcan en algunos momentos y, a pesar de que el embarazo es una fase repleta de sentimientos como dudas y ansiedades, los nueve meses de gestación son un tiempo precioso, que posibilita la elaboración de esta nueva condición.

El momento correcto va mucho más allá de lo que se espera socialmente. Es aquel cuando el deseo se manifiesta y da a la mujer la posibilidad de pensar al respecto, tomar la decisión de una forma consciente y, de esa forma, tener una mayor disponibilidad emocional para asumir ese nuevo papel en su vida.


FAMILIA

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El labio leporino es una condición de nacimiento (congénito) caracterizada por una división o separación del labio superior y puede ocurrir en uno o ambos lados. Aunque se desconoce la causa exacta, el riesgo de tener un hijo con una discapacidad física puede aumentar con la utilización de ciertos medicamentos durante el embarazo.

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¿Cómo debe ser la consulta con el pediatra después de los dos años de edad?

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De los dos a los seis años es importante que los padres conversen y hagan el acompañamiento con el pediatra para que se explican las tasas de crecimiento y el desarrollo motor e intelectual, entre otras cuestiones propias de la edad, así como las orientaciones sobre vacunación y rutina alimentaria de los pequeños.

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